viernes, 17 de abril de 2015

Costa Rica: Parque Nacional de Monteverde: Excursión nocturna a la selva y paseo por Santa Elena


Una vez instalados en el hotel Heliconia, decidimos dar un paseo por el pueblo (Santa Elena). Es bastante pequeño y lleno de subidas y bajadas, al menos para llegar al hotel. En cualquier caso los taxi son bastante baratos.
Decidimos hacer una excursión nocturna a la selva, realmente no disponíamos de mucho tiempo, por lo que independientemente de la meteorología no podías dejar nada para otro día. Nos recogieron en el hotel y nos llevaron a un punto desde donde nos internaríamos en la selva, atardeciendo. Nos equiparon con linternas y ya alrededor del meeting point empezamos a ver serpientes en los arboles (imagino que puestas por ellos) y otros animales como colibrís y mariposas.
El recorrido en si fue interesante, se hizo de noche cerrada pronto y tenias la sensación de estar realmente en mitad de la jungla, aunque realmente lo que hicimos fue caminar por senderos mas o menos circulares que te daban la sensación de internarte mucho pero en realidad no era para tanto.
La magia, especialmente cunado el grupo quedaba callado era increíble. Si apagamos las linternas podíamos ver luciérnagas volando entre los arboles. Tuvimos la oportunidad de ver escorpiones, serpientes (esta vez totalmente libres), tarántulas, tucanes durmiendo, etc, etc. Las fotos son algo mediocres porque no disponía de un buen flash.
En resumen totalmente recomendable, aun siendo para turistas al uso, es algo que no os podéis perder en Monteverde.












































martes, 14 de abril de 2015

Costa Rica: De Puerto Viejo al Parque Nacional del Arenal y Monteverde



Continuando con nuestra ruta y con la ayuda de nuestras anfitrionas de Puerto Viejo, conseguimos coger un transporte colectivo (furgoneta) que nos llevaría directos a la población de La Fortuna (El Arenal). El viaje fue bastante ameno, paisajes preciosos, selvas por todos lados, carreteras bastante mejorables pero aceptables y como no... lluvia, mucha lluvia.

En la Fortuna nos alojamos en un hotel poco acertado pero muy céntrico. Tras dar una vuelta por el pueblo, casi atardeciendo y con lluvia, apenas tuvimos tiempo de hacer algunas compras y cenar. El volcán del Arenal era imposible de ver con las nubes, ni esa tarde ni probablemente al día siguiente, por lo que decidimos adelantar viaje a Monteverde para el día siguiente. Conseguimos transporte que incluía furgoneta-barco-furgoneta hasta Monteverde y de paso realizábamos una excursión por el lago Arenal. Eso si, todo bajo una densa manta de agua y niebla que nos acompaño todo el tiempo. Finalmente llegamos a Monteverde a través de un camino de cabras donde pensé que la furgoneta o transporte colectivo nos iba lanzar barranco abajo (patinaba continuamente y el camino se hizo infernal), todo ello con tal de evitar un montón de horas de viaje si se hace solo via carretera. A pesar del riesgo lo recomiendo. El hotel de Monteverde fue toda una sorpresa. Habitación gigantesca, dos camas superkingsize y con todas las ventanas con vistas a la selva. Toda una recompensa al viaje.